Después de mi experiencia positiva con BYC en los muslos, me atreví a usar BYC en el escote y el cuello. ¿Y qué puedo decir? El resultado es abrumador. Me puse una camiseta recortada por primera vez en años e incluso volví a ponerme un collar. La sensación de poder volver a lucirme es sencillamente indescriptible. Estoy muy contenta.
Rafaela S.
